lunes, 22 de agosto de 2016

Walter y Pilar


Hace poco terminé de leer dos libros recomendados por mi psicóloga: "Enamórate de ti", de Walter Riso; y "Lecciones de seducción", de Pilar Sordo. Buenísimos. Quiero compartir los mensajes generales de ambos, pero sin dar más detalles porque son una lectura obligada para quienes quieren hacer un cambio en sus vidas partiendo por sí mismos.

Sobre el libro de Riso, rescato el hecho que aprendí algo que nunca me habían enseñado ni en mi entorno familiar o amical, ni en el colegio, ni en la universidad, ni en ninguna otra parte: si sabes que hiciste algo bien, elógiate y recompénsate tú mismo, no debes esperar a que los demás lo hagan.

Es verdad, cuántas veces hemos buscado el reconocimiento externo, ante los resultados positivos logrados con esfuerzo y talento. Nos cansamos de esperar, por lo menos, la palmadita en la espalda y esta nunca llega. Se vuelve un golpe directo al autoestima, pues el pensamiento inmediato será: entonces no fue la gran cosa.

Pero Riso te voltea la torta y pide que dejes de pensar así para aplicar lo que el llama el autoelogio y la autorrecompensa. El primero implica felicitarnos a nosotros mismos -en voz alta o mentalmente, como más les acomode- por las cosas que hicimos bien, de una manera positiva y constructiva. 

Sobre el segundo, el psicólogo italiano dice: "Cuando hayas hecho algo que valió la pena o simplemente porque se te dio la gana, date gusto. Ten a veces un acto de merecimiento y amor para con tu persona (...) Darte gusto implica la autoadministración de cualquier cosa que te haga sentir bien y que, obviamente, no sea nocivo para tu salud, ni para los otros, ni para el mundo que habitas".


Por su parte, Pilar Sordo te da las pautas para seducirte a ti mismo antes que a cualquier otra persona. Y tiene toda la razón ¿cómo se puede querer a alguien cuando no hay amor propio? Este es el punto, al hablar de seducción ella no se refiere a lo erótico sino -y aquí vamos otra vez- al autoestima.

Para ir paso a paso, se toma como curioso ejemplo a la ropa interior. ¿Se han preguntado quiénes los ven en ropa interior? ¿Su pareja? ¿El médico? Pocas personas, en verdad. La lista queda casi nula si, sentimentalmente, están solos; pero olvidamos a alguien muy importante: ustedes mismos. 

Lo que "Lecciones de seducción" les dice es que muchas personas no ponen la atención debida a su ropa interior porque solo ellas lo ven, es decir, prefieren gastar en otras prendas (blusas, pantalones, etc.) porque esas son las que los demás miran. Sin embargo, en la soledad de la habitación, al observarse frente al espejo, les da igual si la ropa interior está desteñida, gastada o rota, y eso denota no solo descuido, también falta de cariño a sí mismos.

Parece frívolo, pero Sordo va más allá de sostenes y calzones en sí, lo que trata de decir es que si yo me quiero lo suficiente, quiero verme y sentirme bien para mí, antes que cualquier otra cosa. Eso implica -y vamos nuevamente con el ejemplo- a que tenga una ropa interior linda, que me produzca satisfacción cuando me vea al espejo, que yo misma me guste y seduzca.

Tienen que leerlo, sobre todo porque los capítulos vienen divididos en un mes del año y con una pequeña tarea al final de cada uno. Ambos libros son totalmente hermosos e ideales para quienes quieren trabajar en su autoestima. Yo solo he comentado los aspectos que más me impactaron, pero hay mucho más para hacerlos analizar su pasado y realizar ejercicios prácticos. Léanlos y compártanlos con quienes lo necesiten. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario